Semillas de la nueva era
Ser semilla es lo que tiene, que piensas que nada existe todavía hasta que te das cuenta de que los que pensaban en enterrarte para siempre, lo único que estaban haciendo era darte la oportunidad de convertirte en una nueva existencia. La tierra fértil la fuimos abonando entre todos los que hemos evolucionado despiertos en los últimos años en Gaia.
La casa está ya preparada, nuestro guía atento para acompañarnos entre acequias para llegar a ella; viajamos desde comarcas cercanas y lejanas para compartir un ilusionante encuentro esperado, organizado y gestionado con amor.
Y así de ilusionadas, las semillas conscientes nos vemos un sábado de febrero, gris de cielo y azul de mar, verde de césped y amarillo de jugo de limón. Con nueces y mandarinas, con chips de kale y tomate, con yoga matinal terapéutico y arcillas energéticas; sonrisas en círculo de vida nueva, mirándonos y escuchándonos, abrazándonos y aprendiendo de todos; regalándonos conocimiento, recibiendo bienestar y apoyo.
Reconociéndonos como simientes únicas, ricas en nutrientes esenciales, ejercemos nuestro deseo de construir una nueva huerta vital. Los ingredientes necesarios ya habitan en la comunidad, en la nueva tribu local Ubuntu.
Agradecemos los tiempos históricos que nos han traído hasta aquí; nos elevamos y nos desapegamos de ellos; volamos hacia el universo. Somos polvo de estrellas y con ese deseo de crearnos nos lo creemos y empezamos.
¡Bienvenidas, semillas, y gracias, gracias, gracias por estar aquí! Namasté.
Tribu «Comarques de Castelló»
Texto: Elia García Saura